La poda por aire es una técnica diseñada para fomentar que la planta crezca con un sistema de raíces más denso, aumentando así la absorción de agua y nutrientes, permitiendo que la planta crezca más rápido y más saludable en un reducido volumen de tierra.
Con esta técnica, cuando las puntas de las raíces llegan al borde de y quedan expuestas al aire relativamente seco, las células apicales en las puntas de las raíces se deshidratan y se podan por aire. Esto estimula el crecimiento de raíces secundarias que se extienden por toda la tierra hasta que llegan nuevamente a las paredes de, quedan expuestas al aire y se podan otra vez, estimulando más el crecimiento de raíces.
El efecto global de esta técnica es la creación de un sistema radicular bien desarrollado que se distribuye de forma equilibrada a lo largo de toda macetela.
Estructuras radiculares sanas y altamente ramificadas, permiten a la planta absorber más agua y nutrientes y de esta forma acelerar el crecimiento y aumentar su salud en general.
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